25.3.22

General Palanca (Calle del)


Entre los paseos de Santa María de la Cabeza y de las Delicias. Distrito 2 (Arganzuela). Barrios de la Chopera y Delicias. 

Volvemos al sur del Ensanche, a una calle que, aunque estaba trazada desde mucho antes, no recibió oficialmente un nombre hasta el 26 de marzo de 1924. Fue el que lleva actualmente, aunque Répide nos indica que antes se conoció como calle Particular

Desde la fecha indicada recuerda a Carlos Palanca Gutiérrez, militar y diplomático nacido en Valencia el 24 de mayo de 1819. Ingresó en el ejército en 1839. Estuvo en varios destinos en la Península y en Filipinas, primero durante unos meses en 1843-44 y otra vez desde 1853. Allí se encontraba cuando se produjo la intervención francoespañola en Cochinchina, conflicto en el que ejerció tareas no solo castrenses, sino también como ministro plenipotenciario. Después estuvo en Canarias, donde casi es encarcelado a causa del tono de una petición de destino en la Península. Sin embargo, el triunfo de la Revolución Gloriosa lo rehabilitó poco antes de ir a prisión. Tras esto, marchó a Puerto Rico y a Cuba, donde participó en la Guerra de los Diez Años. En 1872 retornó otra vez a la metrópoli y se hizo cargo de la capitanía general de Canarias, de la que fue cesado en 1874. De nuevo estuvo a punto de ir a prisiones militares a causa de un artículo publicado ese mismo año en el que criticaba al general Serrano, responsable de su destitución. Sin embargo, por entonces ya estaba enfermo y solo tuvo que cumplir un arresto domiciliario hasta que fue indultado. Murió en Madrid el 16 de junio de 1876.

18.3.22

General Oráa (Calle del)

Marcelino Oráa
(Dibujo de Francisco Sáinz, 1845)

Entre la plaza de Emilio Castelar y la calle de Francisco Silvela. Distrito 4 (Salamanca). Barrios de Lista y de la Castellana. 

Nace nuestra calle junto al paseo de la Castellana con orientación hacia el nordeste y, al cruzarse con la de Serrano da un brusco giro para adquirir la habitual de las calles del barrio de Salamanca, insertándose en su cuadrícula. Pasa también de una anchura respetable a la angostura que muestran sus homólogas sitas entre las vías principales del barrio. Justo en el comienzo de esa parte más estrecha está el que quizá sea el edificio más singular de los que muestra su fachada a esta calle. Se trata de la que fuera casa-palacio del conde de Cedillo, una construcción de aspecto escurialense que es una muestra temprana del estilo nacionalista que tanto predominó durante el franquismo. Sin embargo, esta obra del arquitecto Eduardo Gambra se levantó en 1923. En ella residió en su día Ramón del Valle-Inclán; hoy alberga viviendas de lujo. 

Desde el 21 de julio de 1880, fecha en la que el Ayuntamiento dio u oficializó el nombre de numerosísimas calles de la villa, está dedicada al militar navarro Marcelino Oráa Lecumberri, nacido en Beriain el 28 de abril de 1788. Aunque estudió leyes, durante la guerra de la Independencia empezó a hostigar a los invasores franceses antes de alistarse, en septiembre de 1810. Participó en la guerra y, a su término estuvo destinado en Cataluña, en Navarra y en Valladolid. Se opuso a la invasión de los Cien Mil Hijos de San Luis, durante la cual fue hecho prisionero y posteriormente se le licenció del ejército. Se reincorporó en 1827; cuando estalló la primera guerra carlista era coronel. Se destacó en esa contienda, especialmente en la batalla de Luchana (diciembre de 1836). Acabada la guerra, fue capitán general de Filipinas, donde estuvo entre 1840 y 1844. En 1847 fue fugaz ministro de la Guerra en el también fugaz gobierno de Carlos Martínez de Irujo, marqués de casa Irujo. No fue el único cargo político que desempeñó, pues también fue senador por Teruel y Navarra y, desde 1845, vitalicio, aunque jamás llegó a tomar iniciativa parlamentaria alguna. Murió en su localidad natal el 23 de noviembre de 1851.

11.3.22

General Mitre (Calle del)

Bartolomé Mitre
(Dagerrotipo de 1854)

Entre la Gran Vía y la plaza de los Mostenses. Distrito 1 (Centro). Barrio de Universidad. 

Esta calle no existió hasta que se levantaron las construcciones correspondientes al tercer tramo de la Gran Vía. Forma parte de una pequeña vía proyectada por Octavio y Sallaberry que corta transversalmente a la nueva avenida y cuya otra parte, cruzada la Gran Vía, es la calle del Doctor Carracido (véase). Tiene la denominación actual (sin el nombre de pila del homenajeado) desde el 24 de junio de 1921, aunque fue bautizada el 1 de enero de ese año como calle del General Bartolomé Mitre.

Bartolomé Mitre nació en Buenos Aires el 26 de junio de 1821. Militar, recorrió varios países de Sudamérica antes de volver a Argentina para derrotar, junto a Urquiza, al general Rosas (1852). Diputado por Buenos Aires, apoyó la negativa de esta provincia a aceptar la Constitución federal de 1853, lo cual provocó una guerra civil (1859-61) victoriosa para los bonaerenses. Fue elegido como primer presidente de la República Argentina en octubre de 1862 y prolongó su mandato hasta 1868. En 1863 logró que España reconociese la independencia de su país. El año 1874 se presentó de nuevo a las elecciones, pero fue derrotado fraudulentamente y se puso al frente de una rebelión que fracasó. Se le amnistió y desde entonces encabezó la oposición. No sólo destacó como político y militar, sino que también fundó el diario La Nación, escribió estudios históricos, poesía y novelas, además de traducir, entre otras obras, la Divina Comedia. Murió en Buenos Aires el 19 de enero de 1906.

4.3.22

General Martínez Campos (Paseo del)

El general Martínez Campos, por Madrazo
(Palacio del Senado, Madrid)

Entre las plazas del Pintor Sorolla y de Emilio Castelar. Distrito 7 (Chamberí). Barrio de Almagro. 

El 3 de septiembre de 1852 entró esta vía en el nomenclátor municipal. Si bien al principio había sido conocida como Paseo Novelesco, en la fecha indicada pasó a llamarse paseo del Obelisco. Esto fue así porque en el lugar donde acaba, la plaza de Emilio Castelar, se erigía por entonces el obelisco conmemorativo del nacimiento de Isabel II, que más adelante se trasladaría a la plaza de Manuel Becerra y hoy se puede ver en el parque de la Arganzuela, muy cerca de Madrid Río. El 11 de marzo de 1914 decidió el Ayuntamiento darle su denominación actual, aunque hubo un paréntesis, entre el 23 de junio de 1931 y el 26 de abril de 1940, en que estuvo dedicada a Francisco Giner, una acción bastante lógica, como en seguida veremos. 

El edificio que albergó la Residencia de Señoritas
(Foto: CC BY-SA Luis García, Zaqarbal)

Como nos hallamos en la parte de Chamberí más cercana al paseo de la Castellana es lógico que por aquí abunden los edificios de aspecto noble y monumental. Entre ellos hay varios colegios religiosos, pero, en vivo contraste, también algunos que estuvieron relacionados con una de las organizaciones educativas más importantes e influyentes de nuestra historia: la Institución Libre de Enseñanza. De hecho, su sede estuvo en el número 8 y allí murió uno de sus impulsores, Francisco Giner de los Ríos (de ahí lo adecuado del cambio de nombre con el advenimiento de la república). También fueron de la benemérita Institución las casas que están en los números 31 –hoy ocupado por el British Council– y 46. Esta última es una de las joyas del racionalismo madrileño, una obra de Carlos Arniches Moltó construida entre los años 1932 y 1933, la época dorada de este estilo. Fue la Residencia de Señoritas de la Institución, más tarde Colegio Mayor y hoy tiene ahí su sede el Instituto Universitario de Investigación Ortega y Gasset.

Interior del Museo Sorolla
(Foto: Inés López Martín)

Pero retrocedamos un poco y cambiemos de acera para visitar el que quizá sea el punto más interesante de nuestra calle. Está en el número 37 y es la casa que ocupó en su día el pintor Joaquín Sorolla y en la actualidad alberga el museo que lleva su nombre. Fue su arquitecto Enrique María Repullés y Vargas, que contó con la ayuda del gran artista en su diseño. Hoy encajada entre edificios modernos mucho más altos que ella, en esta casa se muestra una extraordinaria colección de pinturas del valenciano además de enseres y muebles originales magníficamente conservados. 

Arsenio Martínez Campos nació en Segovia el 14 de diciembre de 1831. Estuvo a las órdenes de Prim en la guerra de Marruecos de 1859-60 y en la expedición a México de 1863. Tras la Revolución Gloriosa, marchó a Cuba, donde pasó los tres primeros de la llamada Guerra de los Diez Años. Vuelto a la Península, participó en la Tercera Guerra Carlista en la zona de Cataluña y Levante. Después del pronunciamiento de Pavía que disolvió las Cortes republicanas en enero de 1874 fue partidario de la restauración de los Borbones en oposición al gobierno de Serrano. Sabedor de que se preparaban represalias contra él, marchó de incógnito a Sagunto, donde se sublevó proclamando rey a Alfonso XII el 29 de diciembre de 1874. Con ello dio fin a la Primera República y al Sexenio Revolucionario. Después de esto contribuyó a la liquidación de los últimos focos carlistas. Tras un fugaz paso por las Cortes como diputado por Sagunto retornó a Cuba, donde logró el final de la guerra de los diez años con la paz del Zanjón (1878).

Arsenio Martínez Campos en 1891
(Foto de Zenón Quintana)

 A su regreso de Cuba fue senador, ministro de la Guerra y presidente del Gobierno durante unos meses en el año 1879 a instancias de Cánovas. Desencantado con él, se pasó al partido de Sagasta con quien repitió cargo como ministro de la Guerra entre 1881 y 1883; durante su mandato se creó la Academia General Militar, cuya sede fue el Alcázar de Toledo. Vuelto a la actividad militar, fue capitán general de Cataluña (en esta época sufrió un atentado sin consecuencias) y luego mandó tropas españolas en Marruecos y de nuevo en Cuba tras la reanudación de la guerra en 1895. Solo duró un año allí dada su incapacidad de lograr un nuevo acuerdo de paz como el de 1878; fue sustituido por Valeriano Weyler y retornó a la Península. Murió en Zarauz el 23 de septiembre de 1900.