24.6.22

Gómez Ortega (Calle de)

Busto de Casimiro Gómez Ortega en Añover de Tajo
(Foto: Gustavo332)

Entre las calles de Rodríguez Marín y de Emilio Campión. Distrito 5 (Chamartín). Barrio de El Viso.

Poco hace que hemos hablado de la calle del General Zabala, de la que dijimos que fue partida en dos por la prolongación de Príncipe de Vergara. Algo muy semejante le ocurrió a nuestra calle, paralela de la citada, que hoy solo conserva su nombre en su tramo inicial. La porción de la calle de Cartagena que va desde López de Hoyos hasta Pechuán fue en su día parte de la vía que ahora tratamos. 

Su nomenclatura ha sido variada. El 2 de marzo de 1887 se rotuló como calle de Maroto, quién sabe si recordando al célebre general carlista que protagonizó con Espartero el “abrazo de Vergara”. El 1 de mayo de 1914 recibió su denominación actual (de la que en seguida hablaremos). Sin embargo, ya sabemos que desde finales de los años 60 del siglo pasado nuestra calle fue dividida en dos y, mucho tiempo después, el 22 de diciembre de 1988, alguien debió de decidir que esa separación se prestaba a que la parte que había quedado al oeste de la gran arteria se llamase de otra forma, así que ese día fue dedicada al pintor madrileño José Bardasano Baos. Poco duró el cambio, sin embargo. El 30 de septiembre de 1991, coincidiendo con la “anexión” a la calle de Cartagena del tramo que había quedado más allá de Príncipe de Vergara, esta vía volvió a ser la de Gómez Ortega. 

Casimiro Gómez Ortega nació en Añover de Tajo el 4 de marzo de 1741. Estudió en España e Italia para convertirse en médico y farmacéutico, pero quizá su actividad más relevante sea la de botánico. Gracias a él se trasladó el Jardín Botánico de Madrid a su ubicación actual. Además, propició algunas de las expediciones botánicas de finales del siglo XVIII a América y Filipinas y describió numerosas nuevas especies de plantas. También tuvo veleidades literarias, sobre todo poéticas. Murió en Madrid el 30 de agosto de 1818.

17.6.22

Gómez de Mora (Calle de)

La Casa de la Villa, antigua sede del Ayuntamiento
(Foto CC BY-SA Pazit Polak)

Entre la plaza del Conde de Barajas y Puerta Cerrada. Distrito 1 (Centro). Barrio de Palacio. 

Ya aparece, aunque sin nombre, esta calle en el plano de Texeira. La primera denominación que tuvo fue Conde de Barajas (véase la plaza de tal nombre) y, desde el 28 de diciembre de 1944, está dedicada al gran arquitecto Juan Gómez de Mora. Nació en Cuenca, donde fue bautizado el 25 de mayo de 1586; fue discípulo de su tío Francisco de Mora y heredó en 1610 su cargo de maestro mayor de obras de los palacios reales de Madrid y El Pardo. Aunque hay importantes obras suyas fuera de nuestra villa, como la Clerecía de Salamanca (1617) fue en Madrid donde dejó su huella más fecunda y genial. Se le deben el convento de la Encarnación (1611-16) y el edificio que fue sede del Ayuntamiento en la plaza de la Villa (1640). Entre las obras que ya no se pueden admirar, destacan las reformas hechas en el Real Alcázar (1619-27) y la plaza del Arrabal, hoy Mayor (1617-18), ambas borradas del mapa de Madrid por varios incendios. El genial alarife conquense murió en Madrid en febrero de 1648.

10.6.22

Gobernador (Calle del)

(Foto CC BY-SA Basilio)

Entre la costanilla de los Desamparados y el paseo del Prado. Distrito 1 (Centro). Barrio de las Cortes.

Ya en el plano de Texeira aparece esta calle con su nombre, cuyo origen proviene de una curiosa tradición. Curiosa me parece no por ella en sí, sino por los rodeos que dan nuestros cronistas de cabecera para no citar la que muy posiblemente fue su fuente: Antonio Capmani y Montpalau, tantas veces tachado de fantasioso en su obra sobre los nombres de nuestras calles. Cita don Antonio in extenso en su texto sobre esta vía algún documento del siglo XIV con el que se pretende justificar la existencia de “gobernadores” que mandasen en la villa de Madrid. Peñasco y Cambronero indican secamente que no conocen “los alcaldes-gobernadores en la historia de la administración municipal de Madrid” y antes que fiarse en la tradición (que citan, como se hará en seguida en este artículo) razonan que probablemente viviese aquí en tiempos algún gobernador del Consejo de Castilla. Répide es menos drástico y se limita a decir que la tradición es “un tanto confusa”. 

¿Cuál es? Se cuenta que en el siglo XIV tenía aquí su casa y huerta un tal don Julián de Picos, “alcalde gobernador” de Madrid, de carácter tan despótico que las quejas del pueblo llegaron a oídos del rey Alfonso XI, el cual lo cesó y mandó derruir su casa. A pesar de estos antecedentes, aún hoy se le recuerda en el nombre de esta calle. Como colofón, no me resisto a reproducir otra frase de Répide, que indica sin duda alguna que no hay nada nuevo bajo el sol: “D. Julián de Picos, que era de una tiranía tan inaguantable como la de cualquier personajillo de actualidad…” 

Una curiosidad: durante un breve periodo de tiempo, entre el 18 de junio de 1873 y el 6 de julio de 1874, nuestra calle se llamó del Once de Febrero de 1873, es decir, el día en que se proclamó la Primera República.

3.6.22

Gil de Santivañes (Calle de)

En esta célebre vista aérea de Madrid en 1854 el edificio con chimenea de la derecha 
es un taller de carruajes que se ubicaba donde hoy está la calle que nos ocupa.
(Grabado de Alfred Guesdon)

Entre las calles del Cid y de Serrano. Distrito 4 (Salamanca). Barrio de Recoletos. 

Poca historia se puede contar de esta tranquila y aristocrática calle que, en realidad, no conmemora a ningún personaje concreto. Debe su nombre a la familia que era propietaria de los terrenos cuando se abrió. Su primera denominación fue calle de Santibáñez, otorgada el 23 de noviembre de 1874 (Peñasco y Cambronero hablan de la calle de Santivañes, más acorde con el nombre actual). Después de la guerra civil se cambió para dedicársela a unos personajes pertenecientes al bando sublevado, los hermanos García Noblejas. Esto ocurrió el 30 de diciembre de 1944. Pero cinco años después estos hermanos fueron recordados en una vía bastante grande que era (y es) prolongación de la Ciudad Lineal, con lo cual, para evitar duplicidades, el 15 de abril de 1953 se le dio el nombre que hoy lleva.