27.4.18

Don Quijote (Calle de)


Litografía de Cyprián Majerník (1909-1945)


Entre las calles de Raimundo Fernández Villaverde y de la Reina Mercedes. Distrito 6 (Tetuán). Barrio de Cuatro Caminos.

Poca historia tiene esta calle, dedicada a uno de los personajes de ficción más conocidos de todos los tiempos. No anda muy lejos su amada Dulcinea. La única mención que hacen nuestros cronistas se debe a Répide, que nos aclara que en sus tiempos la designación no era oficial. Así que, como en otros muchos casos, lo que hicieron los vecinos por su cuenta luego lo bendijo el Ayuntamiento. Aunque seguro que el bueno de don Alonso Quijano se merecía mejor homenaje.

13.4.18

Don Pedro (Calle de)


Pedro de Toledo Osorio, V marqués de Villafranca, por Gian Paolo Bianchi
¿Es él a quien recuerda esta calle?

Entre la plaza de los Carros y la calle de San Buenaventura. Distrito 1 (Centro). Barrio del Palacio.

Cuenta Don Ramón de Mesonero Romanos que en su día de aquí salía el foso o alcantarilla que discurría hacia la Puerta de Moros y por eso, cuando se formó la calle fue llamada de la Alcantarilla. Sin embargo, ya en el plano de Texeira aparece con el nombre actual, debido un don Pedro cuyo palacio andaba por allí cerca. Digo lo de “un don Pedro” porque nuestros cronistas de cabecera no se ponen de acuerdo en sus apellidos. Para Mesonero, es don Pedro Laso de Castilla; para Peñasco-Cambronero, don Pedro Hurtado de Mendoza y Toledo y para Répide, Pedro Álvarez de Toledo. Todos le otorgan el título de Villafranca, unos de marqués y otros de príncipe. Parece Répide el que está más cerca de lo cierto y, aunque con cierta reserva, tal vez se pueda afirmar que se trate de Pedro Álvarez de Toledo Osorio, quinto marqués de Villafranca, nacido en Nápoles el 5 de septiembre de 1546 y muerto en nuestra villa el 17 de julio de 1627. Fuese él o no, la villa de Madrid le vendió bastantes de los terrenos que había por esta zona –y que, según Répide, se propusieron cuando eran un despoblado como emplazamiento para una ermita de San Roque que al final no se levantó– y allí construyó un primer palacio que no debía de ser muy grande, pues cuando lo renovó quedó en el recuerdo como la “casa chica de D. Pedro”. 

También levantaron aquí, ya en el siglo XVIII, un caserón los duques del Infantado, el que hoy ocupa el número 1 de la calle y cuya espalda da a la Carrera de San Francisco. Tal y como indica la guía del COAM, en el interior de su portalón conserva una puerta de estilo renacentista que perteneció al castillo granadino de La Calahorra. Y en el número 14 continúa el Colegio del Sagrado Corazón, que ya mencionan Peñasco y Cambronero.

6.4.18

Don Felipe (Calle de)


(Foto: CC BY 3.0 Asqueladd)

Entre la plaza de San Ildefonso y la calle de la Madera. Distrito 1 (Centro). Barrio de la Universidad.

Anteriormente se denominaba calle del Rosario, y de esa manera aparece en el plano de Texeira. Según Répide, el nombre de Don Felipe fue la versión popular que al final prevaleció sobre la oficial, como tantas otras veces ha ocurrido. 

Don Felipe de Acuña, que vivió en esta calle, fue alcalde de Corte y Rastro, como nuestro ya conocido Francisco Chinchilla, pero Don Felipe no fue tan denostado, ni tan famoso por su tremendo celo a la hora de hacer cumplir la ley. Al contrario, la memoria popular recuerda a este magistrado como un individuo bondadoso, modesto, caritativo e incluso clemente, aunque también tuviese como cualidad el ser bastante severo en su profesión. Es célebre la ocurrencia que tuvo al hacer testamento. Cuando el notario, sin duda instigado por los propios interesados, inquirió a Don Felipe si entre tanta limosna dada a los necesitados dejaría algo para sus criados, contestó “el perdón por todo lo que me han robado”.