Entre la calle del Monte Esquinza y el paseo de la Castellana. Distrito 7 (Chamberí). Barrio de Almagro.
Esta calle, pequeña y casi oculta tras las torres de Colón, recuerda al político y escritor gaditano Antonio Alcalá Galiano. Nació en la Tacita de Plata el 22 de junio de 1789 y fue hijo de Dionisio Alcalá Galiano, heroico marino que murió en la batalla de Trafalgar. La primera mitad de su vida fue un continuo ir y venir de España a causa de sus ideas políticas. Su apoyo al pronunciamiento de Riego en 1820 le valió el exilio cuando en 1823 se puso fin a la aventura constitucional; durante esos tres años se mostró como un exaltado liberal que hizo famosa su labia en la tribuna del café La Fontana de Oro. En 1834 pudo regresar a España desde el Reino Unido, donde se había establecido. Cambió de tendencia y se pasó a las filas moderadas, que encabezaba Martínez de la Rosa, pero tras los sucesos de La Granja tuvo que marcharse otra vez. Si en 1823 eran los absolutistas los perseguidores, en 1836 lo fueron los progresistas. Volvió en 1837, pero de nuevo emigró en 1841, y no regresó hasta 1843. Sin embargo, al final de su vida el perseguido se convirtió en perseguidor, ya que Alcalá Galiano fue uno de los protagonistas de la llamada noche de San Daniel, el 10 de abril de 1865. Era ministro de Fomento del gobierno de Narváez cuando se produjeron los hechos, y substituyó al destituido rector de la Universidad Central, Montalbán, por el marqués de Zafra. Gravemente le debió afectar esto, pues al día siguiente, 11 de abril de 1865, moría.
Como escritor, empezó siendo periodista en su Cádiz natal, labor que le ocupó desde 1811 hasta 1840. Prologó la obra El Moro expósito del Duque de Rivas en 1834, y ese texto es considerado como fundamental dentro del romanticismo literario español. Escribió además obras sobre derecho e historia, además de unas Lecciones de literatura española (1835) y dos libros autobiográficos: Recuerdos de un anciano y Memorias, publicados póstumamente los años 1878 y 1886. Fue miembro de la Real Academia.
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